Mariquita |
Quizás sea un buen momento para comenzar una nueva sección en este blog; un apartado dentro de la danza que represente una revelación sobre la mujer y la danza. Revelación en el sentido de descubrir que este arte, que a simple vista todo el público asocia a la mujer, ha sido dirigido y orquestado por hombres, que, en gran medida (casi siempre), han silenciado a muchas mujeres. No se trata de representar la comedia de víctimas y verdugos, sino poner el foco, nunca mejor dicho, sobre mujeres que han representado un hito silenciado en la historia de la danza (y dentro de ella en el ballet).
Laure Fonta |
El libro de Ana Abad reseñado hace algunos meses es una buena prueba de ello.Ana Abad
Encuentro hoy un artículo que reivindica, en la revista digital francesa Danses avec la plume el papel de tres mujeres, que se encuentran a caballo entre el siglo XIX y comienzos del XX: Mariquita (bailarina, coreógrafa y maîtresse de ballet), Louise Stichel (bailarina y maîtresse de ballet de la Ópera de París) y Laure Fonta (bailarina, coreógrafa e historiadora de la danza).
Louise Stichel |
Estas tres mujeres coreografiaron, enseñaron ballet, se atrevieron a dirigir compañías importantes, pusieron en valor el papel de algunos bailarines que eran apartados por no tener influencias y realizaron un papel importantísimo en la recuperación de la historia de la danza anterior a su época con reconstrucciones coreográficas y estudios sobre danzas antiguas (como es el caso de Louise Stichel). Fue más fácil, en los años 30 decir que no había existido nada entre Giselle y la "nueva época"; cuando no se conoce la historia es fácil engañar al gran público.
Recordemos hoy sus nombres.
A continuación facilito el enlace para que los lectores puedan acceder al artículo completo, que está en francés.
Excelente artículo. Me gusta mucho este giro de tu blog
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